Cristina le sacó la anaranjada a Timerman

Quienes la conocen describen que es impiadosa con aquellas mujeres que quieren sobresalir sobre su figura, pero a la vez generosa con las esposas de colaboradores que le confiesan sus quejas. Cristina es una talibán defensora del matrimonio y de las cuestiones de género. Pasó hace poco con Valeria Loira, la esposa del titular de la Administracion Nacional de la Seguridad Social (Anses), a quien le dio mucho predicamento en dicho organismo tras interceder a su favor por un probema que su ex secretaria tuvo con Bossio. Ahora se comenta que la solidaridad llegó a la ex esposa del canciller Héctor Timerman,  Anabella Sielecki, quien decidió separarse del funcionario a fines del año pasado y ahora estaría en pleno operativo de reconciliación a raiz de un viaje que compartieron en Roma. Los vaivenes del canciller congelaron la relación con la presidenta, que también le recriminó cierta frivolidad en sus Twitter , los que ya se hicieron espaciados y menos polémicos. Cristina no hará cambios hasta cumplir su mandato aunque ya sabe con quienes no cuenta. En tanto, el actual embajador en la OEA, Jorge Arguello, se prueba el traje de futuro canciller por si Cristina repite otro mandato.