Cristina metió quinta a fondo para proteger a Boudou

La Presidenta sorprendió a la oposición doblando la apuesta en defensa de Amado Boudou. Le hizo deshacer las valijas de su viaje a Colombia y lo envió a poner la cara en el Senado. La jugada, por cierto muy fuerte, plantó bandera en momentos que radicales y otros bloques iban a pedir votar la suspensión del Vice como titular de la Cámara Alta, algo que seguramente no iban a poder concretar ni en número ni por reglamento. El mensaje fue, sobre todo, para la propia tropa, que venía insinuando desgano y malestar por tener que bancar al procesado en el caso Ciccone.

En labor parlamentaria, Pichetto le advirtió a Morales dos cosas: “Preside Boudou y se acabó el sistema de pregunta-respuesta en el informe de Gabinete”. Quedaron helados. Coqui defendió la gestión con el coro de aduladores.

¿Por qué Cristina llega a tanto? Primero, no hace política mirando Tinelli. Después, a Boudou le debe un par de acciones muy importantes para el esquema de su poder. Una de ellas, cuando arremetió contra el ex Procurador Esteban Righi, a quien desplazaron por no compartir el proyecto de Justicia Legítima. Quizás otras razones de mayor profundidad se escondan, por ahora, en la investigación del Juez Lijo.