El rumor circuló la última semana entre diputados y senadores, opositores y oficialistas. Se afirmaba que el Servicio Penitenciario Federal iba a salir de la órbita del ministerio de Justicia y pasaría a manos del poderoso Sergio Berni. Ocurre que las internas dentro del SPF obligaron a renunciar, a mitad de año, al polémico Víctor Hortel, quien juró venganza. Y hace pocos días se fue Alejandro Marambio. Al igual que su antecesor, el joven abogado no pudo contener la ola de fugas en todo el país. El Gobierno parece haberse quedado sin nombres para ese puesto caliente. La idea de entregarle el SPF a Berni no sonaba disparatada. El ministro en las sombras sigue ganando poder y demostró buen manejo de las crisis. Pero fuentes cercanas a Berni lo desmintieron ante una consulta de ExpedientePolitico. La continuidad de Emiliano Blanco parece la única salida en este momento. Este lunes fue ratificado mediante un decreto publicado en el Boletín Oficial. Pero la situación de las cárceles no debería dejar a nadie tranquilo. Y mucho menos a un funcionario tan joven.