El gobierno cubre la ausencia de la presidenta rodeando a Boudou

Mauricio Macri acertó en el diagnóstico. Dijo en el programa de Lanata: “Este no es un gobierno muy normal, que tenga equipos, reunión de Gabinete y la figura del vice presidente no tiene estatura moral”. Aquí reside el verdadero problema del efecto político de la dolencia presidencial, que en la mayoría de los casos se cura con reposo. Con absoluto secretismo se especuló, hasta último momento, en ocultar el hematoma cerebral, hasta que los médicos de la Favaloro fueron categóricos: “La presidenta debe descansar por lo menos un mes”. La dolencia de hematoma subdural crónico se cura con reposo, sobre todo del tipo trabajo “intelectual”. Aparentemente, para desdramatizar, no habría un traspaso formal del poder , vía decreto presidencial. Si un esquema de repartición de roles.  Zannini quedará como el hombre de acción política, la dupla Kicillof y Guillermo Moreno en economía, y Amado Boudou en una función protocolar. El imponderable encuentra a un gabinete cruzado por el internismo y pase de facturas.