Fuertes presiones en el noticiero del 7

Desde que estalló el caso Boudou, la gerencia del noticiero de canal 7 y dos estrechos colaboradores ejercen una fuerte presión sobre una serie de figuras que llegaron al canal para dar señales de apertura en el medio estatal. La primera señal la tuvo uno de estos periodistas, a quien le dijeron: “No es cierto que se allanó el departamento de Boudou. Clarín miente”. Otro caso más reciente fue en una entrevista al ministro de interior, Florencio Randazzo: el conductor escuchó críticas por haberse salido del libreto, que indicaba sólo preguntas sobre los nuevos DNI. Los verdaderos profesionales del 7 advierten que en estos 6 meses de gerenciamiento del ex notero de Duro de Domar, Carlos Figueroa, la calidad del noticiero viene en baja. Cabe recordar que este treintañero, clon de ex cronista de CQC, no tiene ningún antecedente de labor profesional en periodismo que acredite tamaña responsabilidad. Su pasado tiene que ver con haber sido integrante de la Murga Los Dandys (murga que encantó a la presidenta por sus cánticos anti Clarín) y fue conocido como bloguero K. La presión directa sobre los periodistas la ejerce el duo de los Taricos, tío y sobrino que secundan a Figueroa. Dicen en broma, por los pasillos del canal, que son familiares del imitador radial, pero puertas adentro no hacen chistes. El jefe de gabinete, Abal Medina, es el responsable de estas designaciones, por supuesto refrendadas por la presidenta. Muchos ya extrañan a Aníbal Fernández.