La Yapa de la semana

Yo no fui. El responsable de la Unidad Médica Presidencial, Luis Buonomo, tomó contacto off the record con algunos periodistas para despegarse del primer comunicado sobre la salud de la presidenta que daba por cierto el cáncer. Dice que él no participó sino que fue el equipo de Scoccimarro.

De Radios. Conductores de Radio 10 intetaron conseguir un aumento de sueldo. El primero que recibió un contundente no fue el Negro González Oro. No le sirvió ser confirmado en la segunda mañana.

Confesión. La conversación fue unos días antes del fatal desenlace. Soria, al lado de otro gobernador, cenaba tras el anuncio de Cristina de refinanciar la deuda por un año. De repente el rionegrino se confesó de una forma brutal: “Mi mujer está muy loca, quiero hacer el bolso e irme… me huele hasta la ropa que tengo puesta”, confesó.

No le falta nada. Guillermo Moreno armó un equipo de fútbol en el Mercado Central con 500 pibes, hijos de los feriantes. Dicen que el proyecto se lo toma con la misma pasión que la función pública.

Plan B. Al parecer, Jorge Capitanich ya tenía comprados los boletos por línea aérea privada para pasear con sus hijas por el Caribe, pero debió postergarlo para ir a la reunión de gobernadores con Cristina en la Rosada. Después habría decidido ir con el avión privado, lo que ahora lo dejó en medio de una gran polémica.

De Negocios. El Grupo Irsa vendió parte del Museo Renault a una de las principales cadenas de sushi. Se trata de Dashi, que está vinculado con el dirigente de River Rodolfo D´Onofrio.