Moyano: débil afuera, fuerte adentro

No le será fácil al gobierno sacar a Hugo Moyano de la CGT, pese a que ha sido efectivo a la hora de aislarlo del PJ y los Barones del Conurbano. Su imagen sigue siendo muy mala entre la comunidad y el proyecto de construcción política expansiva encontró sus propios límites. Sin embargo, puertas adentro de la central, el camionero ha conseguido abroquelar fuerzas. La propia dinámica de los acontecimientos económicos y su muñeca lo encuentran fortalecido. Los popes sindicales saben que se vendrán años difíciles, de mucha puja salarial, y que volver a experiencias de secretarios generales títeres del Poder Ejecutivo de turno tendría un alto costo. En tanto, Cristina dio la señal de volver a impulsar la figura sucesoria del titular de la Uocra, Gerardo Martinez, quien está denunciado por organismos de derechos humanos, por supuesto agente de inteligencia del Batallón 601. Habrá muchas maldades cruzadas de por medio, por ejemplo una fue la que cristalizó Moyano días atras en el Senado de la Nación, llegando a un acuerdo: uno de sus hombres, a cargo de los empleados parlamentarios, fue quien fimó con Cobos el nombramiento de 30 nuevos cargos jerárquicos, antes de que llegue Amado Boudou. En la movida, el jefe de bancada oficialista, Miguel Angel Pichetto, no estuvo ajeno.

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