Tibieza en Cancillería por el caso de los dos argentinos detenidos en Rusia

El canciller Héctor Timerman solo se refirió al caso de los dos argentinos de Greenpeace detenidos en Rusia en el programa 678, y la cancillería no dictó ningún pronunciamiento oficial. Luego el tema de la pastera, ex Botnia, dejó este tema aún más relegado. Camila y Hernán están presos, acusados de piratería, por la acción del grupo ecologista del último 19 de setiembre, cuando unos activistas intentaron trepar  la plataforma de la petrolera “”Priraslomnaya”, en el mar Pechora. El gobierno nacional mantiene una relación tensa con Greenpeace a partir de que estos  los denunciaron por connivencia con la minería a cielo abierto, de parte la Barrick Gold. La pregunta que surge es ¿por qué si, en su momento Cristina tomó como bandera los derechos de la médica cubana, Hilda Molina, que no podía salir de su pais para visitar a familiares en el nuestro, o Néstor que encabezó en la región un operativo de rescate de rehenes de las Farc, ahora el gobierno se mantiene parco con el destino de dos argetninos presos en Rusia, un país de dudoso respeto a los derechos humanos? Si no fuera por la excelente actitud del cónsul argentino en Rusia, Jorge Nicolás Zobenica, quien se trasladó a Murmansk, donde están detenidos, y es el nexo entre los argentinos y sus familias, la situación sería de absoluto aislamiento. Trascendió que Camila está entera y escribió una carta a sus padres expresando sus convicciones intactas sobre la acción realizada. En tanto, Hernán, un marino mercante marplatense, es quien más extraña y su entorno está muy angustiado.La situación juridica es compleja. Holanda es el país que encabeza la protesta por la liberación. Según los abogados del grupo ambientalista, solo Ángela Merkel podría destrabar la situación, como líder europea. La crisis del Ártico, es la segunda situación de crisis de la organización. La peor fue en 1985, cuando el barco Raimbow Warrior I fue hundido, por parte de Armada francesa, que realizaba pruebas nucleares al sur del Océano Pacífico.En esa oportunidad murió un fotógrafo holandés que formaba parte de Greenpeace.