Una tregua frágil

Finalmente vuelven los subtes, tras diez días de paro. La tregua, alcanzada anoche, dejó la espina de cierta fragilidad en los objetivos trazados. La ciudad debió mediar sin estar de acuerdo en darles entidad a los activistas. Todavía la empresa no cerró con los Metrodelegados un acuerdo salarial sustentable, por lo que la medida de fuerza quedó activada. Macri logró a medias nacionalizar el conflicto e involucrar a todos los Metrodelegados con el kirchnerismo, ya que terminó pagando un alto costo ante la bronca de los usuarios. Ahora tendrá que encarar el traspaso del subte con el gobierno nacional, exigencia que tendría que alcanzar antes de fin de año. El levantamiento del paro sin resultados notorios a la vista dejó un fuerte internismo entre los rebeldes que se ocupó en dejar en evidencia el titular del PO, Jorge Altamira. Dijo que hay muchos Metro que no quisieron firmar el provisorio acuerdo y ven con recelo el acercamiento de Segovia y Pianelli al kirchnerismo.