Alta tensión política dentro del kirchnerismo

El revés electoral del domingo alteró el clima dentro del Gobierno. Aníbal quedó herido tras su derrota y apunta directamente a Scioli, que al final no se va a reunir con Cristina. ¿Hablaron?

Las elecciones explotaron el clima que se vive dentro del kirchnerismo. El sorpresivo e histórico triunfo de María Eugenia Vidal sobre Aníbal Fernández dejó mal parado al jefe de Gabinete, que ya el lunes aseguró que perdió por la traición de alguno de los compañeros, y los resultados a nivel nacional golpearon directamente a Daniel Scioli.

Aníbal apunta a Scioli por su derrota. Para él, el papel de Ricardo Casal en la denuncia periodística sobre narcotráfico fue determinante. Eso, que tuvo su primer capítulo antes de las PASO y volvió a estar en la boca de todos antes del 25 de octubre por una cámara oculta, cree el ex candidato que fue orquestado por el gobernador y ahora con los números consumados se transformó en su principal enemigo.

Pese a lo que trascendió en un primer momento, Cristina y Scioli no se van a reunir. Todavía no hablaron y no está previsto que lo hagan por ahora. Desde el entorno de la jefa de Estado, aseguraron que Scioli ahora tiene tres “monstruos”: Cristina, La Cámpora y Aníbal.

La propia agrupación se ausentó en el Luna Park. El gobernador sabe todo esto y piensa los pasos a seguir. Dentro de su espacio hablan de correr a Cristina de la campaña, aunque no será fácil: la presidenta hablaría mañana en cadena nacional.

Mientras tanto, desde Carta Abierta le piden a Scioli que revea algunos miembros del Gabinete. Es decir, lo obligan a radicalizarse. El problema es que Scioli quiere “ser más Scioli que nunca”. Verdaderas contradicciones de un proyecto en problemas.