Lo primero que hay que indicar es que la convocatoria de Moyano no fue todo lo masiva que se esperaba por parte de la CGT. El acto, no obstante, tuvo un cifra nada despreciable que oscila entre 30 mil a 40 mil personas según distintas fuentes informativas consultadas. Los zigzagueos sobre si era un paro general o no dejaron muy expuesto al camionero sobre que su poder en la central obrera está acotado. Sin embargo, la reelección al mando de la central obrera no estaría perdida. En el palco se lo vio al secretario general de los municipales Amadeo Genta, gremio que contiene a una gran cantidad de congresales. No lo acompañó a Moyano la clase media anti cristina. Solo hubo unos pocos careroleros. La marcha quedó muy marcada por camioneros, que demostraron otra vez una organización muy pulida que evitó incidentes en la Plaza, pese a la ausencia dela  policía. Lo mejor de Moyano fue su discurso. Desafiante dentro del peronismo y aperturista hacia sectores medios, Dicen que escuhó mucho en estos días previos a Julio Bárbaro. Sostienen, desde su círculo, que Moyano quedó ayer como el primer adelantado en animarse a Cristina. Sabe que no le da para ser candidato pero si para marcarle la cancha a otro peronista, como Scioli, para que siga ese camino.