El mundo River, preocupa al Gobierno

No es solo la depresión de la mitad de los hinchas del país sino también el escándalo político por el deficiente operativo de seguridad que tuvo  la fatídica fecha frente a Belgrano de Córdoba, en el Monumental. La posible suspensión del estadio mundialista por 20 fechas (lo propuso uno de los representantes del Gobierno pero se vota recién este miércoles) hasta podría complicar la final de la Copa América. El mayor escándalo está situado en la amenaza de la que fue víctima el árbitro del partido, Sergio Pezotta, a quien un grupo de barras le dijeron en el vestuario, durante el entretiempo, que lo iba a matar sino cobraba un penal. El apriete estaría registrado en una cámara de seguridad, ya a disposición de la justicia. Un dirigente de River, cuyo nombre no trascendió, se comunicó telefónicamente con uno de los barras, al que le habría dado la orden para presionar al referí. Los dos violentos señalados son el jefe de los Borrachos del Tablón, Martín Araujo, y un camionero de Moyano de apodo Goro. La problemática va creciendo, y la cúpula del gobierno nacional no sabe cómo frenar el caso sin que aparezca más en evidencia la equivocación de haber habilitado el partido con público.