Gracias Cris!

graciasLa presidenta cumplió las formalidades del caso y se hizo presente anoche, unos 15 minutos, en la Sala de Periodista de la Rosada. Sus colaboradores comprometieron a los acreditados  a que debía ser una charla informal y sin preguntas de coyuntura. No faltaron ácidas ironías de Ella sobre el rol de la prensa y la relación periodistas y empresas. Después, por su cuenta de Twitter, lanzó mas “cariño”: “Y pensar que muchos de los que hoy escriben en los medios están convencidos de que ser periodistas es ser opositores. Que cosa no?“.Desde el comienzo, el matrimonio del poder tuvo como objetivo desacralizar la profesión de periodista y quitarle el halo de supuesta “objetividad”. La contra cara: el gobierno reivindica el periodismo militante. Como estrategia llevó adelante acciones de presión pública sobre figuras del medio o cronistas que se atrevieron, en las contadas conferencias de prensa, a salir del libreto oficial. La idea de tensión innata que contiene a esta profesión con el poder de turno, se transformó en un enfrentamiento por el valor de la credibilidad y la mediación social. Cabe recordar a un ex presidente Pinguino llamando directamente a celulares de reconocidos periodistas para convencerlos que lo que opinaban del gobierno no era tan así, o la primera conferencia que brindó Cristina, en la que evaluó las preguntas más que contestarlas. “Quién te manda Magnetto?”, lanzó Nestor K ante un periodista de Clarin que quería saber su impresión sobre su declaración jurada y números que no cierran, cosa que fue festejada por funcionarios, intendentes y hasta sindicalistas que ahora rompieron con el gobierno.Varias veces Cristina, ya como presidenta, hizo lo mismo con acreditados de La Nación. La llave siempre fue hacer creer, que la cabeza de estos colegas está manejada y manipulada por los empresarios para los que trabajan. Así se fue generando una atmósfera de conspiración permanente, que hizo que otros kirchneristas se cuidaran de brindar información. Último capítulo, solo por ahora: el Estado modificando horarios de fútbol para ganarle a un programa periodístico crítico del gobierno. Hay que ser agradecidos por tanta cordialidad. Gracias Cris!