Se debilita el músculo parlamentario de Milei

Hay facturas cruzadas de sectores del gobierno. La estrategia del “violeta se lleva todo” ha puesto distancia en sectores acuerdistas.

El Congreso no es necesariamente un instrumento apreciable para el presidente libertario. Si por él fuera, prescindiría del Palacio legislativo, al que le atribuye gran parte de los males de la Argentina. Sin embrago, hay una mala noticia para el primer mandatario: su poder real es relativo y la gobernabilidad requiere mínimos consensos.

El triste espectáculo, de la última función en Diputados, dejó un mensaje en la botella rota de la democracia. Pese a poder ganar elecciones, la nueva fuerza de al LLA tiene una complejidad intrínseca compleja para ser un equipo confiable y sustentable en el tiempo.

Las peleas, de bajo del presidente, son notorias. En la cuenta regresiva del armado electoral, para los dos próximos round en la estratégica provincia de Buenos Aires, hay caminos inciertos. El PRO está quedando afuera de un acuerdo macro y solo, algunas de sus figuras, harán el salto a galocha hacia las Fuerzas del Cielo.

En tanto, los gobernadores reacionaron en bloque con el reclamo de fondos , aunque sus razones son también defensivas hacia la mososierra política . Eventuales aliados,  se ven avasallados por las ínfulas de Karina Milei, quien peretende imponer la lista en cada uno de los distritos.

Hay un problema que asoma para Milei, en medio del cisne negro del fallo Prebeska que- desde Nueva York- dijo que el Estado argentino debería ceder el 51 % de las acciones de YPF,  y es que el próximo 8 de Julio vencen las facultades delegadas.

En el mejor de los casos, después de octubre, engrosarían un poco más sus filas, pero sin contar con mayorías sólidas en ambas Cámaras . Nada garantiza, que sus patitos en fila se reordenen. Con solo ver a Lemoine filmar a su colega Marcela Pagano acusándola de Kuka, hay motivos para la preocupación.

En el mejor de los casos, el oficialismo podrá seguir zafando, raspando la olla de sus ingredientes discordantes. Libra o un posible juicio político siempre son amenazas para un fogoso líder de sueños releccionistas.

Horacio Caride