El fútbol duerme tranquilo con Oyarbide

Otra “casualidad” de la Justicia argentina. El juez federal Norberto Oyarbide investigará si hubo lavado de dinero en las transferencias de 444 jugadores de fútbol. La noticia debería conmover el ámbiente futbolero, pero hay un antecedente reciente que deja tranquilos a todos. En la causa de los pasaportes truchos, que se inició en 2007, el fiscal Luis Comparatore está esperando hace meses que el juez se decida a firmar la elevación a juicio oral. Por algún motivo no lo hace. Ese expediente generó fuertes cruces entre el fiscal y el polémico juez. En el marco de la investigación sobre el anillo de Oyarbide, Comparatore había dicho que Oyarbide tiene un tren de vida de “lujos exorbitantes e imposibles de ser afrontados con el sueldo de un magistrado”de primera instancia. Luego pidió apartarse del caso por sentirse “maltratado” por el juez en la causa de los pasaportes falsos, pero el juez Torres se lo negó. En febrero, la Cámara federal le ordenó a Oyarbide “no prolongar indefinidamente la instrucción” sobre los pasaportes truchos. En la causa se investiga el accionar de gestorías dedicadas a la  tramitación de pasaportes para que jugadores argentinos pudieran  desempeñarse en el fútbol europeo, pero que tenían inconvenientes o les  faltaban requisitos para obtener el pasaporte y la ciudadanía italianos. Están procesados la gestora María Elena Tedaldi, acusada de ser la jefa de una asociación ilícita, y otras 40 personas vinculadas a la maniobra, entre ellas Aldo Forlín, padre del jugador. En el juzgado de Oyarbide, pudo saber Expedientepolítico, dicen que hace poco “se corrió vista” a las partes, para que opinen sobre la elevación a juicio, y que en la última etapa hubo gran cantidad de nulidades, pero que están cerca del juicio oral. Habrá que ver si finalmente hay condenas en el mundo de la pelota, no hay que olvidar los escándalos de las barras, o si pesarán más las afinidades futboleras de jueces, fiscales y secretarios.